Caracteres macroscópicos. Píleo de hasta 80 mm de diámetro, primero cónico o acampanado, finalmente convexo, con un neto mamelón o papila; margen regular, recto, fino, estriado por transparencia. Superficie piléica separable, higrófana, lisa, serícea,  seca y mate en tiempo seco; de color pardo marrón oscuro en tiempo húmedo, palideciendo a gris beige en tiempo seco. Láminas prietas, desiguales,  escotadas; de color, primero,  gris beige claro, después rosa salmón, arista entera, concolor. Estípite hasta 150 x 10 mm, cilíndrico, ensanchándose un poco hacia la base, pronto hueco, fibrilloso longitudinalmente, pruinoso en su parte superior; de color pardo grisáceo o sepia más o menos claro, base blanca por los restos de micelio. Contexto delgado, blanquecino o grisáceo; olor y sabor harinoso.

Caracteres microscópicos. Basidiósporas de 10,0-14,5 x 8,0-9,5 µm / Q = 1,2-1,6; angulosas, de 5-7 ángulos, apiculadas, amarillentas vistas en agua. Basidios hasta 45 x 12 µm, tetraspóricos, juntas con fíbulas.  Queilocistidios hasta 70 x 15 µm, subcilíndricos a sublageniformes. Pileipellis formada por un cutis, con hifas de hasta x12 µm, algunas finamente incrustadas, con pigmentación pardo marrón, juntas sin fíbulas.

Ecología. En primavera y otoño, en bosques termófilos de frondosas (Fagus, Quercus), más raramente bajo coníferas (Picea, Pinus), en suelos calcáreos. Distribución. Poco frecuente.